El Día de Reyes es un día mágico y muy especial. En este blog queremos hablar de las características de este día tan único y recordar que nunca hay que perder la ilusión.
El Día de Reyes es uno de los días más esperados del año por muchos, especialmente por los más pequeños. Se trata de un día muy especial debido a muchos motivos, el principal es que los Reyes Magos ya han pasado por cada una de nuestras casas para dejarnos esos regalos que tanto hemos pedido y deseado. El segundo motivo, consecuencia del primero, son las caras de sorpresa y alegría ya sea de los adultos o de los niños al abrir esos regalos que tanta ilusión les hacían, la cara de la felicidad.
Además de todo lo que hemos comentado, este día destaca por ser un día familiar que pasamos con los nuestros y en el que comemos el postre tradicional del día de Reyes: el delicioso Roscón de Reyes.
En este blog vamos a hablar un poco sobre la magia del día de Reyes, todas esas cosas que lo convierten en un día tan esperado por todos.
La mañana de Reyes
Todos recordamos escribir esas cartas interminables a los Reyes en las que pedíamos cosas imposibles, esas que luego llevábamos al buzón para que les llegaran a sus majestades, los Reyes Magos de Oriente, a tiempo para tener en cuenta nuestras peticiones.
Una vez enviada la carta, la cuenta atrás para el 6 de enero comenzaba, contando los días para abrir todos esos regalos y disfrutar de ellos con los nuestros. Esa espera parecía interminable, pero al fin, llegaba el día esperado. Saltábamos de la cama corriendo para ver que habían dejado los Reyes para todos, caras de ilusión y mucha emoción en el ambiente.
La forma en la que vivimos la mañana de Reyes los adultos, es distinta, pero no menos mágica. Ver a los peques de la casa abriendo sus regalos con ojos de sorpresa, las sonrisas agradecidas de los mayores, el ambiente festivo y familiar, una forma muy positiva de empezar el año.
Es por ello, que la mañana de Reyes es tan especial, nos da mil y un momentos de risas y cariño para recordar el resto del año.
Fuente: Pinterest
Un manjar digno de Reyes
El postre por excelencia del día de Reyes es sin duda el Roscón de Reyes, pero ¿qué sabemos acerca de este delicioso manjar? El origen de este dulce se remonta a la Antigua Roma concretamente a unos dulces en forma de tortas redondas que se hacían al finalizar la cosecha en honor a Saturno, dios de la agricultura. Otro dato curioso es que el haba que nosotros evitamos encontrar en aquel entonces la escondían en algún lugar de la vivienda y el esclavo que la encontraba conseguir la libertad durante los días que duraban las fiestas en honor a Saturno.
Todos conocemos el Roscón de Reyes relleno con una capa de deliciosa de nata, pero en realidad el relleno no se incluyó en el Roscón hasta el siglo XX. Los expertos pasteleros coinciden en que para saborear la masa abriochada aromatizada con naranja y agua de azahar del Roscón es mejor que sea sin relleno.
Con o sin relleno el Roscón va a formar parte de este día y lo vamos a disfrutar junto a una taza de café o de chocolate caliente para celebrar este 6 de enero tan mágico.
El caos del día de Reyes
Una vez han llegado los Reyes y todos hemos abierto nuestros ansiados regalos llega el momento de hacerles un hueco en nuestras casas para no prolongar el desorden en nuestro hogar. Especialmente en el caso de los niños, quieren tener todos sus nuevos juguetes a mano y la solución para que esos nuevos juguetes no invadan cada rincón de nuestro salón, habitación, cocina… son las cestas o los baúles para guardarlo todo y mantener el orden de nuestros espacios. Puedes, además, incorporarlos como elementos decorativos en cualquier lugar y usarlos para guardar todo aquello que esté a la vista cuando tengas invitados en casa.
Otra opción para guardar los juguetes de los niños en su habitación o cuarto de juegos son las cestas de algodón trenzado que ayudarán a conseguir esa sensación de orden que muchas veces escasea en estas habitaciones.
Esperamos que os traigan muchas cosas los Reyes y que disfrutéis de este día con la ilusión y la emoción con la que lo hacen los niños. ¡Feliz día de Reyes!